Todo comienza con una idea: Construyendo tu autoestima


Una idea: eres capaz y valioso.

Parece simple, pero para muchos de nosotros, puede ser una noción radical. La autoestima, ese sentimiento a menudo esquivo de confianza y valía personal, puede fluctuar como la bolsa de valores. Pero la buena noticia es que, al igual que el mercado, hay formas de fortalecer tu autoestima y fomentar una imagen personal más positiva.

Quiérete a ti mismo primero y todo lo demás cae en orden. Tienes que quererte a ti mismo para hacer cualquier cosa en este mundo
— Lucille Ball

Aquí tienes algunas ideas para comenzar:

Desafía a tu crítico interno: Todos tenemos esa voz en la cabeza, la que señala defectos y susurra dudas. ¡Reconócela y luego desafíala! Cuando esa voz te diga que no eres lo suficientemente bueno o buena, contrarréstala con evidencia de tus fortalezas.

Celebra los logros (grandes y pequeños): ¿Finalmente dominaste esa receta de la masa de tu madre? ¿Terminaste esa presentación? Reconoce tus logros, sin importar cuán pequeños parezcan. Llevar un diario de «victorias» puede ser una excelente manera de seguir tu progreso y ver lo lejos que has llegado.

Hazte amigo de ti mismo: Trátate con la misma amabilidad y compasión que le ofrecerías a un amigo. Perdónate por los errores y concéntrate en el progreso, no en la perfección.

Abandona las comparaciones: Las redes sociales pueden ser un caldo de cultivo para la comparación, y créenos, todos dan su mejor cara en línea. En lugar de comparar tu trasfondo con el carrete de aspectos destacados de alguien más, concéntrate en tu propio viaje.

Abraza el poder del "no": Establecer límites es una parte fundamental del auto respeto. Aprender a decir "no" a las solicitudes que te agotan la energía o que no se alinean con tus valores demuestra que tu propio tiempo y bienestar te importan.

Construye tu tribu: Rodéate de personas solidarias que te animen y te apoyen. Los verdaderos amigos celebran tus éxitos y te ofrecen un hombro sobre el que llorar en los momentos difíciles.

Cuida de ti mismo: El cuidado personal no es egoísta, es esencial. Dormir lo suficiente, comer alimentos nutritivos y hacer ejercicio con regularidad contribuyen a tu bienestar físico y mental, lo que a su vez afecta tu autoestima.

Sal de tu zona de confort: Probar cosas nuevas puede dar miedo, pero también es una excelente manera de generar confianza. Toma una clase, únete a un club o viaja a un lugar nuevo. Puede que te sorprendas a ti mismo con lo que eres capaz de lograr.


Recuerda, construir la autoestima es un viaje, no un destino. Siempre habrá contratiempos, al incorporar estas ideas en tu vida, puedes cultivar un sentido de ti mismo más positivo y seguro. Y esto, es una idea en la que vale la pena creer.

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